Al fin encontraron lo que buscaban.
Durante un buen rato intentaron convencerla para que se hiciera una pequeña intervención que no requería anestesia general.
Ella los miraba con aquella cara demacrada y les decía que no, que quería abandonar el hospital y marcharse a casa.
Al fin los médicos le dijeron que lo pensara y se marcharon de la habitación.
Yo empecé a decirle que al fin teníamos una lucecita de esperanza: los médicos ya sabían lo que tenía y tan solo era cuestión de hacer aquella pequeña intervención.
Recuerdo que me miró con aquellos hermosos ojos azules y me callé.
Luego le pregunté si quería operarse.
Me miró de nuevo, hizo un mohín y asintió con la cabeza varias veces con una sonrisa.
Estoy seguro de que ella sabía que no iba a salir viva del quirófano.
Al día siguiente se le practicó la operación. No fue fácil y duró más de lo previsto. Al terminar la ingresaron en la UCI.
A las tres de la madrugada, debido a su gran debilidad, murió.
Era mi madre.
Muchas gracias a todos.
Un abrazo.
Recibid ambos dos mis condolencias y mi cariño en forma de abrazo.
Lo siento
Vaya, lo siento mucho. Un abrazo.
Lo siento Don Luis.
La parca está en buena forma, en los tres últimos meses se llevó a mi padre y a la madre de mi mujer que aunque no fue la mía, también lo fue.
Un abrazo.